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Llamado Mundial de Ted Wilson previo al Concilio Anual 2018

Lea a continuación el mensaje enviado por el presidente de la iglesia adventista Ted Wilson. Es un llamado a la oración en relación muchos temas importantes y a problemas de unidad sobre una decisión sensible que será tomada en el Concilio Anual que tiene que ver con el incumplimiento de algunas partes de la organización a una decisión previamente votada en la sesión de la Conferencia General pasada. Podemos sugerir, según el mensaje, que se trata de la decisión de algunas partes de la organización de ordenar mujeres al ministerio. Saludos a cada uno de ustedes como miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día en todo el mundo, casi 21 millones de nosotros. Sí, estoy hablando directamente con cada uno de ustedes, nuestros queridos y fieles miembros del movimiento Adventista de Dios. Próximamente, el Comité Ejecutivo del Consejo Anual de la Conferencia General se reunirá en Battle Creek, Michigan, con el tema “Alcanzar el mundo – Creer en sus profetas” y nuestro tema de la Conferencia LEAD “El pasado con un futuro – Mirando hacia atrás para seguir adelante”. Revisaremos cómo Dios ha guiado a Sus pioneros en el pasado y tenemos una gran confianza en cómo Él nos guiará en el futuro. Como siempre, estamos confiando completamente en él. Salmo 23: 1-3 nos dice: “En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre.” Debemos apoyarnos en Jesús como nuestro Pastor y dejar que Él nos guíe en todo lo que hacemos como Comité Ejecutivo. En nuestro Concilio Anual, veremos una recomendación muy sensible proveniente del Comité de Supervisión de la Unidad que refleja las aportaciones de la iglesia mundial con respecto al cumplimiento de las medidas tomadas por la iglesia de Dios y según lo solicitado en el Concilio Anual del año pasado por representantes de la iglesia mundial. El propósito de esta recomendación es proporcionar un marco para que las organizaciones más cercanas a un problema de incumplimiento resuelvan ese problema de una manera redentora y parecida a la de Cristo. En la responsabilidad que tengo como presidente de la Conferencia General, pido que comience de inmediato una temporada especial de oración que se extienda hasta el sábado 20 de octubre para pedir que se muestre un espíritu amable, respetuoso y amoroso de todos los asistentes para permitir que el Espíritu Santo dirija en las deliberaciones sobre lo que la iglesia mundial desea ver cumplido. Les pido que reenvíen o compartan este mensaje con todos para llegar al campo mundial solicitando una oración especial. Debemos acudir a Dios en oración en todo momento, pero especialmente cuando enfrentamos situaciones difíciles, ya que necesitamos su guía, dirección y sabiduría. Nos enfrentamos a ese momento y necesitamos humillarnos y pedir que la lluvia tardía del Espíritu Santo caiga sobre el pueblo de Dios para continuar su gran misión de proclamar los mensajes de los tres ángeles al mundo en preparación para la pronta venida de Cristo. Sí, ¡Él viene pronto! 2 Crónicas 7:14 nos dice: “si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.” Hermanos y hermanas, me humillo ante Dios, orando a Él, buscando su rostro y apartándome de mis propias inclinaciones, y les pido que hagan lo mismo. Necesitamos avivamiento y reforma en nuestras propias vidas y en la vida de la iglesia. Necesitamos aumentar nuestra total dependencia de Cristo, su gracia y su justificación y santificación de la justicia en nuestras vidas. El diablo sabe que cuando nos humillemos ante Dios y estemos completamente sometidos a Él, caerá la lluvia tardía del Espíritu Santo. Satanás hará todo lo posible para evitar nuestra humilde sumisión a Dios, ya que el diablo puede disuadir y dudar sobre la iglesia de Dios y su autoridad colectiva en los Consejos Anuales o en una sesión de la Conferencia General. Testimonios para la Iglesia, Volumen 9, página 261, dice: “Dios ha ordenado que los representantes de Su iglesia de todas partes de la tierra, cuando se reúnan en una Conferencia General, tengan autoridad”. Independientemente de lo que pueda escuchar o leer, tenga en cuenta que la Conferencia General se ha esforzado cuidadosamente a través del diálogo enfocado, la información precisa y la oración ferviente para brindar comprensión y claridad a la iglesia con respecto al privilegio y la sagrada responsabilidad de cada líder electo de respetar las acciones votadas de las sesiones de la Conferencia General y del Comité Ejecutivo de la Conferencia General, incluso si no estamos de acuerdo con cada acción. Piense en el caos organizativo y la desunión que resultaría si la iglesia no fuera guiada por políticas cuidadosamente discutidas y acordadas mutuamente. Esto requiere fe en Dios y aprender a confiar en el Espíritu Santo para guiar a su iglesia. Le pido a Dios que todos, como miembros de la iglesia a nivel mundial, apoyemos y oremos por nuestra iglesia mundial y por la Conferencia General. Ore por todos los miembros de todo el mundo para que estemos unidos en el espíritu de Dios para cumplir su misión a través de la participación total de los miembros y cualquier otro tipo de alcance personal y público. ¡Qué maravilloso aliento en el Salmo 133: 1 – “!!Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía!” Me humillo ante el Señor y le pido que me mantenga enfocado en la oración de unidad de Cristo en Juan 17 con ese maravilloso deseo de nuestro Señor en el versículo 21, “… para que ellos también sean uno en Nosotros, para que el mundo crea que me enviaste “. Humildemente me comprometo a permanecer enfocado en Cristo y su deseo de unidad y te pido que ores para que la iglesia de Dios haga lo mismo. Por la gracia de Dios, que cada uno de nosotros, y yo incluido, sometamos completamente al perfecto orden y armonía de Cristo, evitando así las dificultades explicadas en Testimonios para la Iglesia, Volumen 1, página 650: “Satanás sabe muy bien que el éxito sólo puede ser el resultado del orden y la acción armoniosa. Bien sabe que todo lo conectado con el cielo está en perfecto orden, que la subordinación y la disciplina más completa marcan los movimientos de la hueste angélica. Se esfuerza en forma deliberada para llevar a los cristianos profesos tan lejos de las disposiciones celestiales como le sea posible. Por lo tanto, engaña aun al pueblo profeso de Dios y los hace creer que el orden y la disciplina son enemigos de la espiritualidad, que la única conducta segura para ellos consiste en dejar que cada uno siga su propio camino, y en permanecer especialmente distintos de los cuerpos de cristianos que están unidos y trabajan por establecer disciplina y armonía de acción. Todos los esfuerzos hechos por establecer orden son considerados peligrosos, una restricción de la legítima libertad, y por lo tanto dignos de ser temidos como el papismo. Estas almas engañadas consideran que es una virtud hacer alarde de su libertad de pensar y actuar en forma independiente. No aceptan el dicho de nadie. No se unen con nadie. Se me mostró que la obra especial de Satanás es llevar a los individuos a sentir que su acto de avanzar por sí mismos está de acuerdo con los propósitos de Dios, y que deben escoger su propio rumbo, independiente de sus hermanos.”. Qué maravilloso es mantenerse enfocado en Jesús y en su misión nacida en el cielo, confiada a nosotros para preparar a las personas, a través del poder del Espíritu Santo, para el pronto regreso de Cristo. Esta es mi pasión. Es la carga de mi alma y la alegría de mi vida. Es donde quiero pasar mi tiempo. Centrémonos en la misión de Dios. Dejemos que alcanzar a los perdidos para Jesús sea nuestra principal prioridad. ¡El Señor nos ha dicho que presionemos juntos, presionemos juntos, presionemos juntos! Una vez más, les pido que entren en un tiempo de oración en todo el mundo desde ahora hasta el sábado, 20 de octubre, orando fervientemente por un reavivamiento y una reforma que solicite que el poder unificador del Espíritu Santo venga a todos en el Consejo Anual. Por favor, que todos sepan de este llamado especial de oración. Que las oraciones de miembros dedicados en todo el mundo resulten en que el pueblo de Dios se unifique en un espíritu de cooperación y misión para cumplir el mandato celestial dado a su pueblo remanente, la Iglesia Adventista del Séptimo Día. Oremos juntos… Fuente: Adventist Review
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